Los Roughnecks quieren convertirse en la marca de Tulsa

Por Guillermo Rojas y Victoria Lis Marino | Tulsa, OK

La casa de los Roughnecks se está renovando y la Semana quiere contarte todo lo que está pasando en el principal club deportivo de futbol profesional de Tulsa. En una reciente entrevista con el actual presidente del club, James Cannon, nos adelantó las nuevas propuestas que los Roughnecks tienen para la ciudad y como planean convertirse en el ícono deportivo de la Oklahoma.

Cannon abandonó el club que presidía en Nashville para desembarcar en Tulsa y hacerse cargo del cambio de cara de los Roughnecks. “Vi la pasión que la gente tiene en la ciudad y me di cuenta de que quiero ser parte de esa visión y cambiar la marca de este equipo de futbol en Tulsa”, dijo con convicción. “Aquí hay futuro para el fútbol, es un trabajo para hacer con la comunidad y con la hinchada”, agregó, a conciencia de que los equipos no se hacen solos, sino con la contribución de todos.

Para Cannon Tulsa lo tiene todo, arte, música, vibra, el progreso se esconde en cada rincón de nuestra bella ciudad, que sólo tiene reminiscencias de aquellos años petroleros. Precisamente por que la ciudad cambió Cannon considera que el futbol también debe hacerlo.

Por eso, la nueva misión de los Roughnecks es lograr que la comunidad se convierta en hinchada.

“Tulsa es una de las ciudades dentro de los 10 mercados más importantes que participaron de la copa del mundo”, afirmó Cannon.

Los Roughnecks están cambiando, y lo primero que están buscando es mejorar el equipo para que la emoción se contagie de adentro hacia afuera.

“Ahora estamos invirtiendo en producto en la cancha, en jugadores.

Tenemos mucha esperanza con esta inversión, porque es un compromiso que tiene todo el club para que seamos exitosos”, dijo Cannon.

Se calcula que el club desembolsará una inversión cuatro veces mayor a la de los pasados años para mejorar el sueldo de los trabajadores, del equipo técnico, las instalaciones y estrategias de mercadeo. Pero el principal compromiso está con la hinchada, como asegura Cannon.

“Este es el deporte del pueblo, por eso necesitamos grupo, gritos, canciones. Queremos crear un ambiente agradable para que vengan todos los que quieran venir. Queremos que todos digan, hay un juego hoy, ¡allí es dónde quiero estar!”.

Los Roughnecks quieren reflejar el cambio de nuestra ciudad, convirtiéndose en el ícono de la comunidad de Tulsa, una institución deportiva capaz de colocar a la ciudad en el mapa global. James tiene muchas metas: ofrecer el mejor futbol, el mejor entretenimiento, tener la mejor hinchada y representar a la ciudad con los mejores jugadores.

“Queremos convertirnos en uno de los mejores 4 equipos de la liga, de esa manera tendríamos más partidos de visitante y podríamos dar a conocer a la ciudad en la post- temporada y a los equipos de la Open Cup”.

Pero como él sabe, la lista es larga y el tiempo escaso, por eso insiste en que “la prioridad es hacer el equipo en la cancha”, el resto vendrá paso a paso.

Los Roughnecks están listos para conquistar nuevos corazones, sólo hay que darles la oportunidad. “A todos los invito a volver a experimentar la nueva cara del fútbol profesional de Tulsa, con precios de boletos para cada persona que quiera venir”, concluyó Cannon. ¿Y tú qué estás esperando para ver la transformación de los Roughnecks? (La Semana)

The Roughnecks are changing, just like Tulsa

By Guillermo Rojas and Victoria Lis Marino | Tulsa, OK

The Roughnecks are modernizing their house and La Semana wants to tell you everything that has been going on in Tulsa’s professional soccer club. In a recent interview with the current president of the team, James Cannon, we had a preview of the plans the Roughnecks have for the team, the fans, and the city of Tulsa.

Before coming to town Cannon was leading a MLS team back in Nashville, Tennessee, and decided to quit everything to be a part of the Roughnecks.

“I saw the passion that Tulsa has and realized that want to be part of that vision and rebrand the team,” he said.

“Tulsa has a lot to offer soccer, it is a great job that needs the input of the community and the fans,” Cannon said, reminding us all that teams are not born out of the blue, they need the contribution of the people to develop a true identity.

According to Cannon, Tulsa is a city suitable for all appetites; it has culture, arts, music, a good vibe, and nice people. Every corner of the city seems to have changed, leaving almost no trace of the “oil society.” And when change comes along, all institutions must abide, which is why the Roughnecks decided to join the trend. Cannon’s new mission is for the Roughnecks to capitalize on their supportive and loyal fans.

“Tulsa is one of the cities among the 10 most influential markets during the last world cup,” Cannon said. “It has a lot of potential.”

The road is long, but the first change of the season is improving the team so that victory becomes a contagious emotion.

“We are now investing in our product, soccer, and our players. We hope that our investments will pay off, because the whole team is imbued with success.”

Roughnecks officials say they are planning to invest four times beyond last season’s figures, money that will help increase the wages of players and assistants, improve the facilities of the stadium and launch a marketing campaign to rebrand the team.

Cannon said the most important thing to achieve is winning the hearts and minds of the fans.

“This is the sport of the people,” he said. “We need songs, cheering, a support net. We will try to create a nice place for all to have great experiences. I want people to say, ‘There is a game tonight and that’s exactly the place I want to be!’”

Branding the Roughnecks means collaborating in the effort to make Tulsa a world class city, and for that many things are needed: offering great soccer, fantastic entertainment, having the best fans and obviously winning games.
But Cannon Is willing to set one milestone at a time.

“Today the priority is the team,” he said. “We want to become one of the four best teams of the league so that we may have more host games during the Open Cup, which will draw more people to the city.”

The Roughnecks, Cannon said, are ready to win your support — you only need to give them a try.

“I invite you all to experience the new face of professional soccer in Tulsa,” Cannon challenged, and with tickets priced for every budget, there is no excuse not to accept. All Tulsans are urged to join in the new transformation of the Tulsa Roughnecks. (La Semana)