Sully Marquez, emprender sin límites / Sully Marquez: “entrepreneurship has no limits”
Por Guillermo Rojas y Victoria Lis Marino | Tulsa, OK
Muchas mujeres hispanas desean darle un giro de 180 grados a sus vidas al llegar a este país y se encuentran trabadas entre la crianza de los hijos, el hogar, la familia y sus propios proyectos. Entre todas ellas estaba Sully Marquez, una mujer hondureña, madre de 4 que pasó de ser una ama de casa a la flamante dueña del almacén Pulperia HN, emplazado en 9720-D E 31st St, Tulsa, ok 74114
Sully decidió hacerles frente a los monstruos de Walmart, Morelos y Las Americas, para especializarse en la venta de productos centroamericanos. “Yo pensé en la idea de traer productos directamente de nuestro país, para satisfacer las necesidades de la comunidad local. Hay muchos hondureños en Tulsa y todos los emigrantes de Guatemala y El Salvador disfrutan de nuestros productos”, reconoció, rodeada de harinas especiales, snacks dulces y artesanías traídas directamente desde Honduras.
Hace dos meses Sully abrió su despensa, y hasta ahora vuela viento en popa, con la cabeza alta y la satisfacción inmensa de saberse dueña de su negocio. “Ahora que trabajo y que trato directamente con mis clientas que son realmente unas luchadoras, veo que las mujeres, en realidad somos siempre emprendedoras y tratamos salir adelante por nuestra familia”, aseguró a sabiendas de que el negocio le permitió romper con el paradigma machista que prima en su país. Sin embargo, Sully no llegó a América para escapar de la violencia, sino, como tantos buscando un mejor futuro para su familia. “Me vine a este país porque tengo mucha familia aquí. Vine para obtener una vida mejor”, aseguró, reconociendo que al principio todo fue difícil porque tuvo que dejar a una de sus hijas en su país. “Eso fue lo más complicado, estar lejos de ella, pero lo mejor es hoy, saber que estoy en un lugar de oportunidades, donde ahora tengo a todos mis hijos, un esposo que me apoya y la posibilidad de emprender y hacer lo que me gusta”.
Sully sueña con expandir su negocio hasta convertirlo en marca, un conjunto de tiendas en las que sus hijos puedan crecer, aprender y trabajar, y sabe que todo lo hace por ellos. “Quiero que se eduquen, que aprendan a ser honrados, a ser buenos ciudadanos, a tener cultura del trabajo y sobre todo ser buenas personas”, dijo. Mientras tanto, desde su almacén les recuerda a todas las mujeres latinas que si se puede, sólo hay que animarse a dar el primer paso.
“Mujeres, échenle ganas, trabajen y recuerden que no estamos solas, podemos estar quedadas en la vida, por alguna situación, pero sepan que podemos salir adelante y sobresalir”. (La Semana)
Sully Marquez: “entrepreneurship has no limits”
By Guillermo Rojas and Victoria Lis Marino | Tulsa, OK
Tulsa, OK- Lots of Hispanic women suffer a 180-degree change when they make it to the US, and some find themselves struggling between everyday chores, raising the children, taking care of their homes, and finding time for their own projects in the land of opportunities. And among these women is Sully Marquez, who came from Honduras with her four kids only knowing how to be a housewife but soon becoming the proud owner of Pulperia HN, a grocery store located at 9720-D E 31st St, Tulsa, ok 74114.
Sully was not afraid of competing against gigantic monsters like Walmart, Morelos and Las Americas, and her will to make a business made her specialize in something she could not find elsewhere, selling products from Central America.
“I thought about the idea of bringing products directly from Honduras to satisfy the needs of the local community. We have lots of Hondurans in Tulsa, and people from El Salvador and Guatemala who enjoy buying at the store,” she said, while surrounded by all kinds of flowers, sweet snacks and crafts from her home country.
Two months ago Sully opened the store, and so far everything seems perfect – sales go up and she walks tall, with the satisfaction of recognizing herself as the owner of her business, of her life.
“Now that I work and speak directly to my clients, I realize they are real fighters. So many women here are entrepreneurs, they work hard and do it for their families,” she stated, acknowledging her business helped her break the circle of machismo that reigns in her country.
Still, it wasn’t violence that made her move to the United State, but the idea of finding new opportunities for the ones she loved.
“I came to America to look for a better future. I have a lot of family here,” she said, confessing that everything has its up and downs.
“The worst thing was leaving my eldest daughter in Honduras while we emigrated,” she recalled with sadness, “but the best is knowing that after eight years, we are all together now. I have a husband that supports me and the chance of doing what I love.”
Sully dreams of expanding her business and developing a grocery store chain where her children can learn the power of hard work and be able to grow in knowledge.
“I do everything for them,” she explained. “I want them to get educated, to be honorable people, good citizens who work hard and have kind hearts.”
In the meantime, behind the counter desk, she reminds all Latin women to give it a go, to take the first step to master their destinies.
“Work hard, and remember we are not alone, we may be standing still at certain times, but we can move forward and be great,” she concluded. (La Semana)
Debe estar conectado para enviar un comentario.