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San Miguel recibe una donación que salva vidas / San Miguel receives a life saving donation

Por Guillermo Rojas y Victoria Lis Marino |Tulsa, OK

Juan José Miret director de comunicacionesde la escuela
está muy agra­decido con tan importante donación

San Miguel es una escuela media emplazada en el corazón de la comunidad hispana de Tulsa que garantiza el éxito académico a quienes corren con más desventajas.

Con tan solo 73 alumnos y ningún apoyo estatal, los directivos de la escuela saben lo difícil que es contar con todo lo necesario para garantizar el cuidado de los alumnos.

Por eso, cuando la Oklahoma Disaster Foundation, anunció la inminente donación de un resucitador, San Miguel, se vistió de fiesta.

“Fue todo gracias a Facebook. Ellos estaban donando estos equipos a distintos lugares públicos y escuelas y como nosotros aquí tenemos niños jugando futbol, al voleibol, y practicando atletismo, es sumamente necesario.  ¡Y nos dijeron que si!, y vinieron a instalarlo”, explicó con enorme satisfacción el director de desarrollo de San Miguel, Juan José Miret.

La máquina recibida por la escuela es un equipo computarizado útil en caso de descompensación cardiaca que se coloca en el pecho del paciente y mientras controla los signos vitales indica los pasos a seguir para esperar a los paramédicos de la manera más segura posible.

Brady Deaton trabaja para la ODR entregando equipos de resucitación, y le informó a La Semana que el programa de donación de equipos escolares nació para ayudar en caso de que un niño o inclusive un adulto sufra un evento cardiovascular. “Es todo automático, se ponen las ventosas en el pecho de la persona, aprietas un botón y una voz te indica lo que debes hacer, y si es necesario el equipo funciona como desfibrilador”, aseguró.

La Oklahoma Disaster Foundation, que se ocupa de asistencia ante todo tipo de destastres, maneja un listado para donaciones, donde cada escuela o institución puede inscribirse para recibir un equipo resucitador, y tras ver una publicación de una maestra de San Miguel en Facebook, solicitando asistencia decidieron ayudar.

“Es un equipo que puede salvar vidas, y por eso es esencial tener uno cerca”, dijo Deaton, orgulloso de poder devolverle algo a la comunidad.

Para San Miguel la noticia es un alivio. “Es un equipo que cuesta más de $10000, no podríamos haberlo pagado nunca”, reconoció Miret.

Ahora todos pueden confiar, en que verdaderamente se puede ir a San Miguel a aprender, y salir adelante para servir a los demás, a conciencia de que la seguridad de padres, niños y adultos estará garantizada. (La Semana)

Brady Deaton y Kristen Harrison | Foto: Guillermo Rojas

San Miguel receives a life saving donation

By Guillermo Rojas and Victoria Lis Marino |Tulsa, OK

San Miguel is a middle school located at the heart of the Tulsa Hispanic community, and is dedicated to guarantee academic success to those that run with less social advantages.

With only 73 students all Hispanics, and no state funds, the school directives are aware of the lacks and needs and how difficult it is to make do and provide what’s best for the student population. So, when the Oklahoma Disaster Foundation (ODR) announced the imminent donation of a life-saving advanced defibrillator, the school was overjoyed.

“It was all over Facebook. They were donating this equipment to different public places and schools, and as we have children playing soccer, volleyball and practicing athletics we realized we desperately needed one,” explained Juan José Miret, Director of Development at San Miguel. “And they said yes, and they came right away to install it.

The machine donated is a computerized equipment useful in cases of cardiac arrest whose mission is to control the vital signs of the patient until the paramedics arrive. Its pads are to be placed on the patient’s chest and records precious information for the doctors to handle.

Brady Deaton works for the ODR delivering the equipment and informed La Semana that the school donation was set to help the student population in case someone suffers a cardiac arrest and doesn’t know what to do.

“It’s all automated, you put it on a person, push a button and a voice will talk you through it and if they need it, you can actually shock them, use it as a defibrillator,” he said.

The Oklahoma Disaster Foundation, always present in times of trouble, handles a list of possible recipients in which all schools can enroll to acquire a resuscitation machine. And after reading a Facebook post of one of San Miguel’s teachers asking for one, they decided to help.

“It is one of those things that can actually save lives, which is why it is better to keep one close,” said Deaton pleased at being able to give back to the community.

For San Miguel, the gift is a relief.

“This equipment costs more than $10,000 – we could never have afforded it,” said Miret.

Now, students, parents and teachers can trust than entering San Miguel means learning and moving forward to serve others, while knowing they are being kept safe and sound. (La Semana)