Asalto a la educación local / An assault on local education
Análisis de William R. Wynn | TULSA, OK
Las escuelas públicas de Tulsa (TPS) y su superintendente, la Dra. Deborah Gist, fueron atacadas el lunes por el ultraconservador superintendente estatal de instrucción pública de Oklahoma. Citando información obsoleta, engañosa o completamente falsa, Ryan Walters dijo que debería haber “un nuevo superintendente de las escuelas públicas de Tulsa”, aunque no llegó a pedir la dimisión de Gist.
“Cuando ves este tipo de liderazgo y ves este tipo de desempeño, los tulsanos merecen algo mejor”, dijo Walters, hablando en la sede del partido republicano del condado de Tulsa. “Ella ha estado aquí siete años. La trayectoria no es buena. No vemos ningún plan serio para mejorarla”.
Walters presentó cifras que muestran que varias escuelas primarias de Tulsa están rindiendo por debajo del promedio estatal en el dominio del inglés. Sin embargo, sus datos son de hace un año y no reflejan las mejoras desde entonces, que se miden mensualmente. La junta escolar de Tulsa evalúa periódicamente esas mejoras o descensos, que utiliza para calificar el rendimiento de Gist. Satisfecha, la junta renovó recientemente el contrato de Gist con el distrito.
Walters también acusó a Gist y al distrito de malversar fondos, pero una vez más sus cifras simplemente no cuadran. Afirmó el lunes que “más de un millón de dólares” fueron malversados en TPS, aunque la cantidad real que está siendo investigada por la policía federal – una investigación solicitada por Gist cuando las irregularidades relacionadas con un contratista privado fueron descubiertas por el propio distrito – es al parecer de 364.000 dólares. Walters no pudo proporcionar la verificación de la cantidad más grande que él demandó.
Walters también afirmó que TPS “gasta el 52% de sus fondos en administración y sólo el 48% en instrucción en el aula”. Los datos del propio sitio web del departamento de educación del estado muestran que esta afirmación también es falsa.
El frenético discurso de Walters se produjo justo un día después de que tomara la plataforma de medios sociales Twitter para difundir la mentira de que TPS está recibiendo dinero de la “China comunista” con el fin de adoctrinar a los niños.
“Tienes a la China comunista que está dando dinero a las escuelas públicas de Tulsa con el fin de socavar nuestro gobierno de los Estados Unidos, nuestro país”, dijo Walters. “Es increíble. De ninguna manera debemos permitir que el gobierno chino socave nuestras instituciones aquí en Estados Unidos”.
De hecho, un solo profesor participó en un programa de desarrollo educativo afiliado a un programa de lengua y cultura chinas sin ánimo de lucro. El salario de esa profesora, junto con todos los materiales educativos utilizados en su aula, están totalmente financiados por el distrito escolar.
“Las escuelas públicas de Tulsa no reciben dinero del gobierno chino, como el superintendente del estado de Oklahoma Walters ha alegado sin pruebas”, declaró TPS.
Walters ha acusado previamente a TPS de intentar “adoctrinar” a los estudiantes para que sean homosexuales o transgénero, y ha acusado a Gist de tener una agenda “woke” e “izquierdista”.
Los padres de TPS se manifestaron en apoyo de Gist el lunes, expresando su temor de que Walters intente que se retire la acreditación del distrito o incluso que se haga cargo de las escuelas de Tulsa.
Gist también emitió una declaración el lunes, diciendo: “Creo en la transparencia y la supervisión. Creo en el poder de una junta escolar elegida localmente. También creo que un solo informe de acreditación tardío y un incidente aislado de malversación de fondos autoinformado no deben hacer que la Junta de Educación de las escuelas públicas de Tulsa pierda el control local sobre el futuro de nuestro distrito escolar”. (La Semana)
An assault on local education
Analysis by William R. Wynn | TULSA, OK
Tulsa Public Schools (TPS) and the district’s superintendent, Dr. Deborah Gist, came under attack Monday by Oklahoma’s ultra conservative State Superintendent of Public Instruction. Citing information that was outdated, misleading, or completely false, Ryan Walters said there should be “a new superintendent of Tulsa Public Schools,” although he stopped short of calling for Gist to resign.
“When you see this type of leadership and you see this type of performance, Tulsans deserve better,” Walters said, speaking at the Tulsa County Republican Party Headquarters. “She’s been here seven years. The trajectory is not good. We don’t see any serious plans to improve that.”
Walters presented numbers showing that several Tulsa elementary schools are performing at below state average in English proficiency. However, his data is from a year ago and does not reflect improvements since that time, which are measured monthly. The Tulsa School Board evaluates such improvements or declines regularly, which it uses to rate Gist’s performance. Satisfied, the board recently renewed Gist’s contract with the district.
Walters also accused Gist and the district of mismanaging funds, but again his numbers simply don’t add up. He claimed on Monday that “more than a million dollars” was embezzled at TPS, although the actual amount being looked into by federal law enforcement – an investigation requested by Gist when improprieties involving a private contractor were uncovered by the district itself – is reportedly $364,000. Walters was unable to provide verification of the larger amount he claimed.
Walters also claimed that TPS “spends 52% of its funding on administration and only 48% on classroom instruction.” Data from the State Department of Education’s own website shows this claim also to be false.
The frenzied address by Walters came just a day after he took to the social media platform Twitter to spread a lie that TPS is receiving money from “communist China” in order to indoctrinate children.
“You have Communist China that is giving money to Tulsa Public Schools in order to undermine our United States government, our country,” Walters said. “It is unbelievable. There is absolutely no way we should allow the Chinese government to undermine our institutions here in America.”
In fact, a single teacher participated in an educational development program affiliated with a nonprofit Chinese language and cultural program. That teacher’s salary, along with all educational materials used in her classroom, are fully funded by the school district.
“Tulsa Public Schools does not receive money from the Chinese government, as Oklahoma State Superintendent Walters has alleged without evidence,” TPS stated.
Walters has previously accused TPS of attempting to “indoctrinate” students to be homosexual or transgender, and accusing Gist of having an agenda that is “woke” and “leftist.”
TPS parents rallied in support of Gist on Monday, expressing fears that Walters will attempt to have the district’s accreditation pulled or possibly even take over Tulsa schools.
Gist also issued a statement on Monday, saying, “I believe in transparency and oversight. I believe in the power of a locally-elected school board. I also believe that a single late accreditation report and an isolated, self-reported embezzlement incident should not cause the Tulsa Public Schools Board of Education to lose local control over the future of our school district.” (La Semana)
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