La cifra de muertos por inundaciones en España llega a 205 mientras los afectados piden ayuda / Death toll from Spanish floods climbs to 205 as shock turns to anger and frustration
BY TERESA MEDRANO AND JOE WILSON – CHIVA, España (AP) — El número de muertos por las inundaciones repentinas en España ascendió el viernes a al menos 205, y se cree que muchas más están desaparecidas, mientras que la conmoción inicial dio paso a la ira, la frustración y una ola de solidaridad.
Las autoridades de emergencia españolas indicaron que 202 de las víctimas se encontraban en la región oriental de Valencia, y los funcionarios advirtieron que se esperan más lluvias en los próximos días.
Los daños causados por la tormenta del martes y miércoles recordaron las secuelas de un tsunami, y los sobrevivientes recogían escombros mientras lloraban a sus seres queridos perdidos en el desastre natural más mortal que se recuerda en España. Muchas calles aún estaban bloqueadas por vehículos amontonados y escombros, en algunos casos atrapando a los residentes en sus hogares. Algunos lugares todavía no tienen electricidad, agua corriente ni conexiones telefónicas estables.
“La situación es increíble. Mucho desastre y muy poca ayuda”, dijo Emilio Cuartero, vecino de Masanasa, a las afueras de Valencia. “Necesitamos sobre todo maquinaria, grúas, para que se pueda acceder a los sitios. Necesitamos mucha ayuda. Y pan y agua”.
En Chiva, los residentes estaban limpiando los escombros de las calles llenas de lodo. La localidad valenciana recibió más lluvia en ocho horas el martes que en los 20 meses anteriores, y el agua desbordó una acequia que atraviesa la ciudad, arrasando calles y hogares.
La alcaldesa, Amparo Fort, dijo a la radio RNE que “han desaparecido casas enteras, no sabemos si con gente o no dentro”.
Hasta ahora, se han recuperado 205 cuerpos — 202 en Valencia, dos en la vecina Castilla La Mancha y uno en Andalucía en el sur. Miembros de las fuerzas de seguridad y 1.700 soldados de la unidad de emergencia están buscando a un número desconocido de personas desaparecidas. Los funcionarios temen que se puedan encontrar más cuerpos en vehículos destrozados y garajes inundados.
La Guardia Civil ha rescatado a más de 4.500 personas atrapadas por las inundaciones, dijo el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, en una conferencia de prensa desde Valencia.
Las autoridades regionales, que están a cargo de la respuesta a la tragedia, pidieron al gobierno central que movilice 500 soldados adicionales, que serán desplegados el sábado.
Juan Vicente Pérez, residente en Chiva, dijo a The Associated Press en declaraciones cerca del lugar donde antes estaba su casa que si hubiera esperado cinco minutos más antes de evacuar, habría muerto.
Imágenes satelitales del antes y después de la ciudad de Valencia ilustraron la magnitud de la catástrofe, mostrando la transformación de la metrópoli mediterránea en un paisaje inundado de aguas lodosas. La autopista V-33 estaba completamente cubierta por una gruesa capa de lodo marrón.
La tragedia ha desatado una ola de solidaridad en todo el país. Durante la mañana, cientos de residentes han llegado a pie a las áreas más afectadas, llevando agua, productos esenciales, palas y escobas para ayudar a remover el lodo. El número de personas que vienen a ayudar es tan alto que las autoridades les han pedido que no conduzcan ni caminen hasta allí, porque están bloqueando las carreteras necesarias para los servicios de emergencia.
“Es imperativo que vuelvan a sus casas”, dijo el presidente regional Carlos Mazón, quien agradeció a los voluntarios por su buena voluntad.
Además de las contribuciones voluntarias, los gobiernos locales han comenzado a distribuir agua, alimentos y productos básicos en escuelas, ayuntamientos y recintos deportivos.
La Cruz Roja utilizó su vasta red de ayuda para ayudar a los afectados por las inundaciones. Desde el martes, ha realizado más de 3.500 intervenciones, la mitad de ellas en 13 de los refugios establecidos por las autoridades, para distribuir alimentos, mantas y productos de higiene, y para proporcionar acceso a internet.
“Habrá secuelas bastante graves. Vamos a encontrar más vulnerables a las personas que ya lo estaban y vamos a encontrar nuevas necesidades porque hay personas que han perdido sus medios de vida”, dijo Ana Gómez, portavoz de la Cruz Roja en Valencia.
Y se esperan más tormentas. El cielo en Valencia estaba parcialmente soleado el viernes, pero la agencia meteorológica española emitió alertas por lluvias fuertes en la región, así como en la costa de Huelva, Andalucía; Tarragona, en Cataluña; y parte de las Islas Baleares.
La tormenta cortó los servicios de energía y agua el martes por la noche, pero aproximadamente el 85% de los 155.000 clientes afectados recuperaron la energía para el viernes, según dijo la empresa de servicios públicos en un comunicado.
“Esto es un desastre. Hay muchísima gente mayor que no tiene medicamentos. Hay niños que no tienen (comida). No tenemos leche, no tenemos agua. No tenemos acceso a nada”, dijo una residente de Alfafar, uno de los pueblos más afectados en el sur de Valencia, a la televisora estatal TVE. “Aquí no ha venido nadie ni a avisarnos el primer día”.
Juan Ramón Adsuara, el alcalde de Alfafar, uno de los pueblos más golpeados, dijo que la ayuda no bastaba para los residentes atrapados en una “situación límite”.
“Hay gente conviviendo con cadáveres en casa, eso es muy triste. Nos estamos organizando, pero se nos está acabando todo”, dijo a los periodistas. “Vamos con las furgonetas a Valencia, compramos y volvemos, pero aquí estamos totalmente olvidados”.
El agua corriente convirtió calles estrechas en trampas mortales y generó ríos que arrasaron hogares y negocios, dejando muchos inhabitables. Las autoridades han arrestado a 50 personas acusadas de saquear tiendas.
Las redes sociales han canalizado las necesidades de los afectados. Algunos publicaron imágenes de personas desaparecidas con la esperanza de obtener información sobre su paradero, mientras que otros lanzaron iniciativas como Suport Mutu —o Apoyo Mutuo— que conecta solicitudes de ayuda con personas que la ofrecen. Otros organizaron recolecciones de bienes básicos a nivel nacional y lanzaron recaudaciones de fondos.
El papa Francisco ofreció oraciones por “los fallecidos, y sus seres queridos, y por todas las familias desamparadas”, así como por los rescatistas que trabajan en Valencia durante la bendición tradicional del Ángelus en la festividad católica de Todos los Santos.
La costa mediterránea de España está acostumbrada a las tormentas otoñales que pueden causar inundaciones, pero esta fue la inundación repentina más poderosa que se recuerda en tiempos recientes. Los científicos la vinculan al cambio climático, que también está detrás de las temperaturas cada vez más altas y las sequías en España y el calentamiento del mar Mediterráneo.
“El cambio climático está potenciando el clima extremo. Podemos esperar ver más de la devastación y la desesperación que hemos estado viendo esta semana a medida que una atmósfera más cálida aporta más energía a nuestro sistema climático”, dijo Clare Nullis, portavoz de la Organización Meteorológica Mundial.
“Como resultado del aumento de las temperaturas, el ciclo hidrológico se ha acelerado. También se ha vuelto más errático, más impredecible”, añadió. “Nos enfrentamos a problemas crecientes de tener demasiada agua o muy poca. Y eso es lo que estamos viendo desarrollarse en España en este momento”.
España ha sufrido una sequía de casi dos años, lo que empeoró las inundaciones porque el suelo seco estaba tan duro que no pudo absorber la lluvia intensa.
En agosto de 1996, una inundación arrasó un campamento a lo largo del río Gállego en Biescas, en el noreste, matando a 87 personas.
Death toll from Spanish floods climbs to 205 as shock turns to anger and frustration
BY TERESA MEDRANO AND JOE WILSON – CHIVA, Spain. (AP) — The death toll from historic flash floods in Spain climbed to least 205 people Friday, with many more believed to be missing, as the initial shock gave way to anger, frustration and a wave of solidarity.
Spanish emergency authorities said 202 of the victims were in the eastern region of Valencia, and officials warned that more rain is expected in the coming days.
The damage from the storm Tuesday and Wednesday recalled the aftermath of a tsunami, with survivors left to pick up the pieces as they mourn loved ones lost in Spain’s deadliest natural disaster in living memory. Many streets were still blocked by piled-up vehicles and debris, in some cases trapping residents in their homes. Some places still don’t have electricity, running water, or stable telephone connections.
“The situation is unbelievable. It’s a disaster and there is very little help,” said Emilio Cuartero, in Masanasa, on the outskirts of Valencia city. “We need machinery, cranes, so that the sites can be accessed. We need a lot of help. And bread and water.”
In Chiva, residents were clearing debris from mud-filled streets. The Valencian town received more rain in eight hours on Tuesday than it had in the preceding 20 months, and water overflowed a gully that crosses the town, tearing up roads and homes.
The mayor, Amparo Fort, told RNE radio that “entire houses have disappeared, we don’t know if there were people inside or not.”
So far, 205 bodies have been recovered — 202 in Valencia, two in neighboring Castilla La Mancha and one in Andalusia in the south. Members of the security forces and 1,700 soldiers from the emergency unit are searching for an unknown number of missing people. Officials fear more bodies could be found in wrecked vehicles and flooded garages.
Guardia Civil has rescued more than 4,500 people trapped by the floods, said Interior Minister Fernando Grande-Marlaska in a news conference from Valencia.
The regional authorities, who are in charge of the response to the tragedy, asked the central government to mobilize an additional 500 soldiers, who will be deployed on Saturday.
“I have been there all my life, all my memories are there, my parents lived there … and now in one night it is all gone,” Chiva resident Juan Vicente Pérez told The Associated Press near the place he lost his home. “If we had waited five more minutes, we would not be here in this world.”
Before-and-after satellite images of the city of Valencia illustrated the scale of the catastrophe, showing the transformation of the Mediterranean metropolis into a landscape inundated with muddy waters. The V-33 highway was completely covered in a thick, brown layer of mud.
The tragedy has unleashed a wave of solidarity across the country. Throughout the morning, hundreds of residents have been arriving on foot in the worst affected areas, carrying water, essential products, shovels and brooms to help remove the mud. The number of people coming to help is so high that the authorities have asked them not to drive or walk there, because they are blocking the roads needed by the emergency services.
“It is very important that you return home,” said regional president Carlos Mazón, who thanked the volunteers for their goodwill.
Other than volunteer contributions, local governments have begun distributing water, food and basic products in schools, town halls and sports venues.
The Red Cross used its vast network of aid to help those affected by the floods. Since Tuesday, it has carried out more than 3,500 interventions, half of them in 13 of the shelters set up by the authorities, to distribute food, blankets and hygiene products, and to provide internet access.
‘There will be quite serious consequences. People who were already vulnerable will be even more, and we are going to find new needs because there are people who have lost their livelihoods,’ said Ana Gómez, spokesperson for the Red Cross in Valencia.
And more storms are expected. Skies in Valencia were partially sunny on Friday, but the Spanish weather agency issued alerts for strong rains in the region as well as the coast of Huelva, Andalusia; Tarragona, in Catalonia; and part of the Balearic Islands.
The storm cut power and water services on Tuesday night, but about 85% of 155,000 affected customers had their power back on by Friday, the utility said in a statement.
“This is a disaster. There are a lot of elderly people who don’t have medicine. There are children who don’t have food. We don’t have milk, we don’t have water. We have no access to anything,” a resident of Alfafar, one of the most affected towns in south Valencia, told state television station TVE. “No one even came to warn us on the first day.”
Juan Ramón Adsuara, the mayor of Alfafar, said the aid isn’t nearly enough for residents trapped in an “extreme situation.”
“There are people living with corpses at home. It’s very sad. We are organizing ourselves, but we are running out of everything,” he told reporters. “We go with vans to Valencia, we buy and we come back, but here we are totally forgotten.”
Rushing water turned narrow streets into death traps and spawned rivers that tore through homes and businesses, leaving many uninhabitable. Authorities have arrested “people accused of looting shops.
Social networks have channeled the needs of those affected. Some posted images of missing people in the hope of getting information about their whereabouts, while others launched initiatives such as Suport Mutu — or Mutual Support — which connects requests for help with people who are offering it. Others organized collections of basic goods nationwide and launched fundraisers.
Pope Francis offered prayers for “the deceased, and their loved ones, and for all the destitute families,” as well as the rescuers working in Valencia during the traditional Angelus blessing on the Catholic All Saint’s holiday.
Spain’s Mediterranean coast is used to autumn storms that can cause flooding, but this was the most powerful flash flooding in recent memory. Scientists link it to climate change, which is also behind increasingly high temperatures and droughts in Spain and the heating up of the Mediterranean Sea.
“Climate change is turbocharging extreme weather. We can expect to see more of the devastation and the despair that we have been seeing this week as a warming atmosphere brings more energy into our climate system”, said Clare Nullis, a spokesperson for the World Meteorological Organization.
“As a result of rising temperatures, the hydrological cycle has accelerated. It’s also become more erratic, more unpredictable”, she added. “We are facing growing problems of either too much water or too little. And that’s what we’re seeing playing out in Spain at the moment.”
Spain has suffered through an almost two-year drought, making the flooding worse because the dry ground was so hard that it could not absorb the heavy rain.
In August 1996, a flood swept away a campsite along the Gallego river in Biescas, in the northeast, killing 87 people.
Medrano reported from Madrid. Associated Press writers Colleen Barry in Milan and Jamey Keaten in Geneva, contributed to this report.
more in original source https://apnews.com/article/flash-floods-spain-valencia-climate-change-c49df08e233b3f791ed27921acdbb752
Debe estar conectado para enviar un comentario.