Madre soltera y emprendedora: la vida de Valentina Valdez / Immigrant, entrepreneur and single mother: the life of Valentina Valdez

Por Guillermo Rojas y Victoria Lis Marino | Tulsa, OK

Valentina Valdez sí que es una mujer moderna, siguió sus sueños y consiguió cada uno de sus deseos sin importar las convenciones sociales ni el esfuerzo dejado en cada jugada. Hoy, es la dueña de Revilla’s Boots and Boutique, una tienda de modas emplazada en la calle 21 y Garnett que le permite ser dueña de su propia vida. Pero lo más importante es que, también, es la dueña absoluta de sus dos gemelas, a quienes decidió tener como madre soltera,  por elección propia.

Emigró hace 17 años desde Aguascalientes y cuando llegó a Tulsa dejó su antigua carrera de dentista atrás y se dedicó a trabajar para no pensar. “Comencé como cajera en supermercados Las Américas y poco a poco me convertí en gerente general”, recuerda la emprendedora sobre sus primeros pasos y progresos. Pero a pesar de estar satisfecha con su empleo, el verdadero sueño de Valentina era otro, tener hijos, aún sin estar en pareja. “Estaba a punto de cumplir quince años en mi empleo y me enteré que estaba embarazada de gemelas”, contó, explicando que decidió ser madre soltera por decisión propia, y para ello se practicó una inseminación artificial. En ese momento Valentina dejó Las Américas para cuidar a sus retoños, y arriesgó el confort de una vida segura en pos de dos sueños, ser mamá y tener su propio negocio.

 “Cuánto más pasa el tiempo como mujer una se pone mas exigente en lo que quiere y me di cuenta que no necesitaba ni un novio ni un esposo para obtener lo que yo queria”, contó la mujer sobre su elección. A pesar de lo duro de manejar a dos niñas solas, Valentina considera que todos los pros son más que las contras. “Tengo el poder total sobre mis bebes, nadie podrá pelearme jamás su custodia. Sé lo que quiero para ellas, y cómo quiero educarlas, y me es más fácil tomar así las decisiones. Cualquiera puede criticar que no tienen una figura paterna, pero estoy trabajando para que eso no les falte”, aseguró.

Valentina fue valiente, se inseminó, cambió de empleo, fundó una boutique exitosa donde vende ropa y atiende a sus hijas las 24 horas siendo madre y padre al mismo tiempo, rompe los moldes mientras hay quienes se pasan la vida entera intentado llenarlos.  “Hay días difíciles en los que las horas no alcanzan para los planes y los projectos, pero estoy súper feliz por como han crecido mis hijas y cómo se han desarrollado”, aseguró.

No hay que pensar en que Valentina es una feminista zelota, y por eso optó por hacer las cosas sola, ella sólo quiso manejar bien su tiempo, y no esperar al amor para ver nacer a sus hijas. “Como opinaba María Felix, las mujeres deben crecer, pero no necesariamente ser iguales a los hombres”, explicó sin tapujos.

Valentina tiene grandes planes y sabe que el tiempo le permitirá conseguirlos. “Quiero que mi pequeño negocio se convierta en una gran empresa para que a mis hijas no les falte nada y que yo pueda seguir haciendo más cosas”, dijo, mientras modelaba la última colección de su tienda.

A todas esas mujeres que quieren pelear por sus sueños Valentina les dice:

“Recuerden que el límite es el cielo, pero siempre y cuando se tengan las metas claras y bien definido el camino. Nada es fácil pero si nos enfocamos todo se puede conseguir”. (La Semana)

Immigrant, entrepreneur and single mother: the life of Valentina Valdez

By Guillermo Rojas and Victoria Lis Marino | Tulsa, OK

Valentina Valdes is truly a modern woman; she has pursued and achieved every single one of her dreams despite social conventions and the effort required with each move. Today she is the successful owner of Revilla’s Boots and Boutique located at 21^st and Garnett, a business that allows her to control her fate and provides independence. But most importantly she is the single mother of her two twins, something she planned and decided with thought. 

She emigrated 17 years ago from Aguascalientes, Mexico, and when she arrived in Tulsa she left behind all her years as a dental professional and started working hard to forge her future.

“I started working as a cashier at Las Americas, and little by little rose up to general manager,” Valentina said proudly. But despite being satisfied with her job, she had a different dream: she wanted to become a mother, even without a partner.

“I was about to celebrate my 15 years at Las Americas when I discovered I was pregnant with twins,” she recalled highlighting the fact that she had an artificial insemination procedure to achieve her dream. In that moment, Valentina left Las Americas to take good care of her health, and to fulfill her two most sacred wishes, becoming a mom and starting her own business.

“As more time passes women’s demands become more focused, and with me and I realized that I didn’t need a boyfriend or husband to obtain what I wanted,” she explained about her choice. In spite of the difficulties she faces daily bringing up the twins alone, Valentina believes the advantages outweigh the trouble.

“I have total control over the girls, no one could ever fight for their custody, and that’s a lot,” she said. “I know what I want for them, the type of life I want them to have and the education they need, and being alone makes all these decisions easier. Some might say they lack a father figure, still I am working on that issue so that they don’t miss a thing.”

Valentina was brave, she got herself pregnant, changed her job, founded a successful boutique and is a full-time mother and father who breaks all standards.

“There are hard days in which there are not nearly enough hours to complete projects and plans, but I’m still delighted to see my daughters grow.”

Valdes is by no means a feminist zealot, even though she decided to go it solo as a parent. She wanted to save time, to be a mother even if she could not find true love. “Like Maria Felix said, women must grow and flourish, but not exactly like men, never like men,” she said.

The future looks big and bright for this single mom and her boutique.

“I want my business to thrive, to turn into a company so that my daughters can have everything they need, and I can keep on doing what I enjoy,” she said while modelling the latest collection of the clothes she sells.

To all those women that want to fight for her dreams, Valentina recommends: “Remember, the sky is the limit, but only when you have clear goals and a well-defined path. Nothing is easy, but if we focus, everything is doable.” (La Semana)